Cuando conversamos con administradores o representantes legales sobre sus principales preocupaciones, la morosidad parece ser un factor común.

Es que si bien conocemos que la misma disminuye en noviembre o diciembre, porque es necesario matricular a los alumnos al próximo año, la morosidad corriente repercute fuertemente en la posibilidad de un crecimiento institucional y de mejorar la calidad de los servicios educativos brindados.

Dependiendo de las facilidades de pago que se brinde, como también de la cultura propia de las familias que asisten a la institución, la misma varía del 10% hasta un 35%. Con estos recursos se podrían solventar inversiones edilicias o de tecnología en la institución.

Lo que los padres no tienen en cuenta al momento de retrasarse con el pago es que, quieran o no, afectan a la calidad educativa que reciben sus niños.

La Ley de Defensa del Consumidor en su artículo 8 bis establece que: “Las cuotas o cualquier deuda que tenga el alumno, solo puede ser cobrada mediante las vías legales, nunca mediante la retención de documentación (título, certificados analíticos), prohibición de rendir o cursar o cualquier otra intimidación”

Por otro lado el Artículo 4035 inciso 2 del Código Civil indica que: “Las deudas tienen prescripción legal (1 año) y debe computarse desde el vencimiento de cada cuota y no a partir del día posterior al último del año lectivo cursado.”

Los colegios no tienen demasiadas alternativas para poder hacer frente a la morosidad y deben buscar herramientas que les permitan poder recuperar lo correspondiente al servicio educativo que han brindado.

Si bien la educación es un derecho, conlleva la obligación del pago de las cuotas en los colegios de gestión privada y la misma Institución se encuentra obligada a mantener una estructura, sueldos, y demás obligaciones que puede afrontar sólo con los ingresos por cuotas.

Con este panorama y frente a la morosidad, las escuelas adoptan distintas estrategias: desde brindar opciones para abonar la cuota por débito automático hasta notificar a las familias de que en caso del incumplimiento, la deuda será derivada a un estudio jurídico, y efectivamente lo hacen.

Herramientas a Utilizar

Comenzar con un estudio jurídico está lejos de ser una decisión amena. Los colegios lo utilizan como última alternativa por falta de opciones para poder recuperar las cuotas adeudadas.

No hay una receta, la forma en que los colegios utilizan este servicio es variada. Algunos envían las deudas cada dos meses, otros cada tres meses o al finalizar el año lectivo.

También varían los acuerdos económicos y el porcentaje de recupero de la deuda. Algunas instituciones educativas abonan una “licencia mensual” al estudio para que tome los casos de morosidad, otras dividen la comisión con los padres y algunas otras trasladan todo el costo (gastos y honorarios) a las familias recuperando el 100% tanto de capital como de intereses.

Primero el diálogo

En las reuniones de comienzo de año suelen informarse estas metodologías: se comunica todo lo vinculado a plazos, incrementos, intereses y demás.

Los colegios que han sido entrevistados nos cuentan que nunca se realiza una gestión por medio de Estudio Jurídico sin antes advertir a los padres.

En primera instancia se envían comunicados solicitando a los familiares que regularicen la situación, se opta por llamados en una segunda instancia y si estas alternativas no resultan, se procede a la gestión por medio de Estudio Jurídico.

Se utilizan también diversas alternativas para brindarle opciones al papá. Por ejemplo, se suele esperar al pago de aguinaldos antes de enviar las deudas a gestión extrajudicial, brindando opciones para que los papás cuenten con los recursos para acercarse a la institución y abonar lo adeudado.

En las comunicaciones escritas y orales se advierte a los papás que en caso de no mostrar intenciones de pago, se procede a la gestión extrajudicial.

Procedimientos

Entrevistamos al estudio “Liderazgo en Cobranzas” de Córdoba que se especializa en prestar servicios de recupero de cuentas morosas para Instituciones Educativas.

Ellos nos comentaron cómo es el procedimiento que utilizan para que los colegios puedan realizar el cobro de aquellas cuotas que aún se adeudan.

Acercamiento de la institución al Estudio: El Representante Legal o Administrador del colegio se contacta con el estudio planteando que tiene morosidad. Luego les brinda un listado de morosos. Por su parte el Estudio empieza a gestionar los primeros llamados para que los padres se acerquen a conocer la situación y ponerlos en conocimiento de que la deuda está bajo una gestión extrajudicial. Siempre se apela al diálogo.

Diálogo con los padres: Desde el Estudio se comunican con los padres para poder detectar si tiene posibilidades y voluntad de pago, y acuerdan un plan. Siempre son distintos ya que depende de cada situación personal. Para “Liderazgo en Cobranzas” es sumamente importante poder conocer y entender cada una de las situaciones planteadas por los padres y así poder oficiar de puente entre los padres y la institución brindando ayuda mutua.

Reconocimiento de la deuda: El Estudio lleva a cabo la firma de un “pagaré” o reconocimiento de deuda por parte del padre. En el mismo se expone que el colegio les dio el tiempo necesario para abonar la deuda y no fue saldada, por lo tanto, ahora tienen otros plazos y costos para afrontar.

Capacitaciones a la Institución: El Estudio brinda capacitaciones a los equipos administrativos de los Colegios para poder gestionar la cobranza de deudas comprendidas entre el 2do y 3er mes para que logren disminuir la morosidad corriente y no se vean perjudicados. Las temáticas usuales son: desarrollo de habilidades en cuanto a la comunicación y escucha, cómo llevar adelante una negociación, entre otros.

Gestión Judicial: El estudio intenta no llegar a esta última etapa y sólo se lleva a cabo en caso de que la Institución así lo requiera. Asesoran a la misma para dar inicio a las acciones legales con resultado positivos.

Resultados

El servicio que presta Liderazgo en Cobranzas, no le significa a la Institución educativa un costo fijo que tenga que afrontar.

El trabajo que realiza el estudio es a riesgo y se pacta con la Institución un porcentaje sobre lo efectivamente recuperado.

Esto quiere decir que si nada se cobra por parte del estudio, nada le puede reclamar a la Institución, a pesar de haber puesto todos sus recursos y herramientas en dicha gestión

La educación es el mejor de los servicios que pueden recibir los hijos. Estamos de acuerdo en que mientras más se pueda invertir, ediliciamente o en tecnología, los alumnos recibirán una mejor educación.

La morosidad es una de las principales causas que impide que lo anterior suceda, es por esto que los colegios se ven obligados a tomar estas medidas para no comprometer la calidad del servicio brindado ni que repercuta en la educación que reciben los más pequeños.